| ||||
![]() |
|
![]() | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
![]() ![]() ![]()
Los movimientos sociales, sindicales y la sociedad civil de Honduras rechazaron la represión militar del domingo que dejó el asesinato de uno de los miles de participantes de la multitudinaria manifestación que esperaba al presidente constitucional de ese país, Manuel Zelaya, y anunciaron que este lunes proseguirán sus protestas pacíficas para exigir el retorno del hilo constitucional en el país centroamericano. Tal como precisó el enviado especial de teleSUR en Tegucigalpa Eduardo Silvera, la población hondureña no retoma la normalidad en el país y se niega a regresar a su trabajo, clases y actividades habituales, a pesar del llamado del presidente de facto y promotor del golpe de estado del pasado 28 de junio, Roberto Micheletti. Aunque el cerco militar permitió, aparentemente el paso, ya dentro de las áreas del aeropuerto el pueblo fue violentamente reprimido. Gases lacrimógenos y disparos contra una multitud que reclamaba la restitución de su presidente, democráticamente electo, provocó la muerte de una persona y decenas de heridos. Luego que se produjera un ataque violento por parte del Ejército hondureño hacia la población, que protagonizaba octava jornada de protesta por la restitución de la democracia en Honduras y el regreso del presidente legítimo, murió un manifestante y el número de heridos aún es incierto. Se estima que entre 120 mil y 200 mil hondureños acudieron a darle la bienvenida a Zelaya. Entretanto, los medios de comunicación privados y el gobierno de facto apoyan la actitud del Ejército golpista, y aplauden el hecho de haber impedido el aterrizaje de Manuel Zelaya, según el recorrido por la prensa hecha por Silvera Mientras se desarrollaban los actos violentos en el aeropuerto internacional de Tegucigalpa, miembros del gobierno de facto de Honduras, protagonizados por Micheletti, ofrecían una rueda de prensa en la que proponían una especie de diálogo con un grupo de la Organización de Estados Americanos (OEA), a pesar que el organismo los desconoce como Gobierno. La madrugada del domingo, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, anunció la suspensión de Honduras del Sistema Interamericano, a raíz del vencimiento del plazo de 72 horas otorgado al gobierno de facto para que restituyera a Manuel Zelaya en sus gestiones legítimas presidenciales. Micheletti, se abstuvo de acatar la medida. Para este lunes, se tenía prevista una concentración a las 08H00 locales (13H00 GMT) desde la Universidad Pedagógica de la capital hondureña para dirigirse al aeropuerto Toncontín. No obstante, en un reciente contacto telefónico, el corresponal Eduardo Silvera informó a teleSUR que posiblemente la manifestación ahora se traslade hacia el palacio presidencial. Silvera también comunicó que otra concentración a favor del presidente de facto Roberto Micheletti, se llevará a cabo dentro del estacionamiento de la Casa Presidencial. Luego que la Policía Nacional se retirara de las inmediaciones del aeropuerto y responsabilizara directamente al Ejército hondureño por las muertes acontecidas en la manifestación de la población, los medios de comunicación privados del país insisten en publicar que se trató no de un ataque a los manifestantes, sino de un "enfrentamiento". Incluso, reportó Silvera que estuvo presente en el aeropuerto internacional este domingo, luego del anuncio del coronel de la Policía Nacional, retiraron el helicóptero que se encontraba sobrevolando los alrededores horas más temprano, y lo ubicaron en una esquina para evitar más sobrevuelos. A pesar del estado de sitio, que este domingo fue extendido por tres horas más temprano, la población hondureña aprovechará el tiempo para salir a las calles y cumplir con la agenda establecida. Luego de que Zelaya intentara regresar a su país para reasumir su cargo de legítimo jefe de Estado hondureño; lo cual fue impedido por fuerzas militares golpistas de su país, presidentes latinoamericanos y los dirigentes de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de Estados Americanos (OEA), se reunieron en El Salvador para analizar sobre las medidas diplomáticas que se tomarán para la restitución del orden constitucional en Honduras. Específicamente, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aseguró que continuará con las acciones para lograr la restitución del presidente constitucional de Honduras Manuel Zelaya. "Como secretario general de la OEA, estoy dispuesto a seguir con todas las acciones diplomáticas para lograr nuestro cometido, cumplir con las normas que todos los países de la región han adoptado, contenidos en la Carta Democrática Interamericana", sostuvo Insulza desde San Salvador.
teleSUR / in - PR ONU, OEA y Latinoamérica continúan apoyando restitución de la democracia en HondurasTeleSUR _ Hace: 16 horas Ante el quebrantamiento del orden constitucional en Honduras, país en el que se perpetró un golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de Estado Americanos (OEA) y varios presidentes de Latinoamérica continúan apoyando el que en esa nación centroamericana se restituya la democracia. Luego de que Zelaya intentara regresar a su país para reasumir su cargo de legítimo jefe de Estado hondureño;lo cual fue impedido por fuerzas militares golpistas de su país, presidentes latinoamericanos y los dirigentes de la Asamblea General de la ONU y de la OEA, se reunieron en El Salvador para analizar sobre las medidas diplomáticas que se tomarán para la restitución del orden constitucional en Honduras. Específicamente, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aseguró que continuará con las acciones para lograr la restitución del presidente constitucional de Honduras Manuel Zelaya. En rueda de prensa ofrecida desde San Salvador, Insulza sostuvo que esas acciones buscarán que se establezca en Honduras el respeto a la Carta Democrática Interamericana en Honduras, luego de que fuese perpetrado un golpe de Estado militar contra Zelaya el pasado domingo y se instalara posteriormente un gobierno de facto en su país. "Como secretario general de la OEA, estoy dispuesto a seguir con todas las acciones diplomáticas para lograr nuestro cometido, cumplir con las normas que todos los países de la región han adoptado, contenidos en la Carta Democrática Interamericana", sostuvo Insulza desde la capital del El Salvador. Sostuvo que el pasado sábado la Asamblea General de la OEA decidió suspender a Honduras debido a la negativa del gobierno de facto instalado en ese país ante el regreso de Zelaya como jefe de Estado Constitucional. "El día de ayer que la Asamblea General de la OEA decidió suspender a Honduras por el grave quebrantamiento del orden democrático. La OEA apoya el retorno a su cargo del presidente Zelaya, que expresó ante la Asamblea su voluntad de regresar hoy a su país", dijo Insulza. Este domingo Zelaya voló desde Washington hacia su país, acompañado por el presidente de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Miguel D' Escoto, pero el avión en el que ambos viajaban no pudo aterrizar en la pista del aeropuerto de Tegucigalpa, la capital hondureña, ante la presencia de obstáculos que pusieron tropas militares golpistas. Ante esa maniobra que impidió el regreso de Zelaya a su país, Insulza consideró que "se hizo muy evidente que la amenaza del gobierno de facto contra la intención de aterrizar el avión del presidente Zelaya". Además de Zelaya e Insulza, en la rueda de prensa en San Salvador estuvieron presidentes de Argentina, Cristina Fernández, de Ecuador, Rafael Correa, Paraguay, Fernando Lugo, El Salvador, Mauricio Funes, y los cancilleres de Venezuela, Nicolás Maduro y Honduras, Patricia Rodas, así como el presidente de la Asamblea General de la ONU, Miguel D'Escoto. En su intervención, Funes señaló que "como presidentes democráticos no podemos permitir que haya una ruptura constitucional en nuestros países, esas son cosas del pasado y debemos exigir que se reinstale el presidente Manuel Zelaya como presidente de la República de Honduras". Indicó que por esa posición, su gobierno decidió permitir que el avión de Zelaya, que fue impedido aterrizar en Honduras, aterrizara en San Salvador, y que permanecieran acá "mientras que el presidente Zelaya pueda entrar a Honduras". Por su parte, D'Escoto recordó que el presidente Manuel Zelaya llego a la ONU "a exponer a los representantes de los 192 países y fue una reunión de un éxito tremendo en la que se aprobó una resolución que se rechaza rotundamente el golpe de estado y pide exige su inmediata restitución". A su vez, Zelaya agradeció la hospitalidad brindada por El Salvador y su presidente, Mauricio Funes, al catalogar a la nación salvadoreña como una prolongación de la Patria hondureña. Sobre la represión del ejército de Honduras contra manifestantes que exigían y esperaban e regreso de Zelaya, la cual dejó saldo de dos muertos y varios heridos, el legítimo presidente hondureño señaló que "han masacrado a las familias que participaban n una marcha pacífica que fue reprimida a balazos". "Hoy se atrevieron a disparar y una persona joven falleció victima de los disparos de un criminal que usa la violencia de las armas para quitarle al vida a un compatriota", añadió Zelaya. Expresó su solidaridad con las familias de los fallecidos durante lo que calificó como "un acto criminal que no puede quedar impune. Consideró que "los criminales no pueden dirigir un país, tienen que pagar sus crímenes", al tiempo que llamó a las Fuerzas Armadas golpistas de su país a "que bajen sus rifles que ahora están en contra del pueblo". "Soldados hondureños no apunten sus rifles contra sus propios hermanos, les pido y les ordeno no repriman mas al pueblo hondureño. Crean que me da dolor y de me traba la garganta", acotó el mandatario hondureño. Agradeció el apoyo expresado por sus homólogos latinoamericanos al expresar que "mientras existan personas de la calidad que han demostrado estos presidentes aquí, de sostener que son los pueblos los que elige, tendremos una esperanza de que el mundo siempre va a seguir mejorando". En representación de los mandatarios presentes, la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, sostuvo que el apoyo a Zelaya "es la garantía última y definitiva para la vigencia de los derechos humanos, que durante el siglo XX han sido tan violentados y que realmente creíamos que habíamos ido superando". En ese sentido sostuvo que lo vivido en Honduras demuestra que la democracia no es un bien definitivo, sino que tiene que construirse permanentemente "no sólo por parte de las autoridades sino también de los ciudadanos". Explicó que su presencia y la de otros mandatario que apoyan a Zelaya no mes una decisión personal, sino que la misma es parte del reclamo "por un mundo que peligrosamente se convierte en unilateral. Queremos trabajar pero un mundo multilateral". Indicó que en el apoyo a la restitución del orden democrático en Honduras "estamos cumpliendo el mandato del respeto de los derechos humanos y de la voluntad popular", al tiempo que exprsó su solidaridad "con el dolor de quienes hoy han sufrido la represión". Aseguró que "contar esto que sucede en Honduras no es defender al presidente Zelaya, es defendernos a todos y cada uno de nosotros, porque es necesario garantizar la democracia y la vigencia de los derechos humanos".
teleSUR/MFD-YR
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.