lunes, 29 de noviembre de 2010

INFORMACIONES HONDURAS ( nr 608 ) 29 noviembre 2010

Informe secreto que Llorens envió a Washington dice que militares, Corte y Congreso conspiraron contra Zelaya
Informe secreto que Llorens envió a Washington                                                                   

Zelaya denuncia doble moral de diplomacia de EE.UU. respecto a Honduras
Zelaya reaccionó de esta manera a los documentos confidenciales del Departamento de Estado publicados este domingo por Wikileaks...
Kaos. Honduras |
El presidente derrocado de Honduras, Manuel Zelaya denunció en entrevista exclusiva a teleSUR la doble moral de la diplomacia estadounidense puesto que sabía que su exilio y el gobierno de facto de Roberto Micheletti atentaban contra la constitucionalidad en Honduras, pero sin importar esto, permitieron elecciones fraudulentas mientras que la resistencia se agolpaba en la embajada de Brasil.
Zelaya reaccionó de esta manera a los documentos confidenciales del Departamento de Estado publicados este domingo por Wikileaks donde se revela que Washington no tiene duda de que en Honduras hubo golpe de Estado contra él.
“Este documento nos va a servir para acudir a la Corte Penal Internacional y de los Derechos Humanos para denunciar a EE.UU. Como Estado violador de los derechos humanos pues no tomó ningún tipo de prevención ante el Golpe de Estado, la revelación de Wikileaks los compromete mucho porque conociendo el delito, lo encubren” dijo Zelaya en entrevista exclusiva a teleSUR.
Manuel Zelaya consideró paradójico cómo el control mediático de los medios internacionales oculta verdades o dice medias verdades, pues ya se conocía antes de la revelación de los documentos de Wikileaks que EE.UU sabía del golpe de Estado en Honduras pues fue fragado en Washington.

Al respecto el mandatario derrocado dijo que “la inteligencia estadounidense sabía del Golpe de Estado (y se apoyó) de la limpieza ideológica de los halcones de Washington, cuyo plan contempló asesinatos de periodistas y en contra de disidencia, no sólo durante el gobierno de Micheletti sino también en el de (el presidente) Lobo”.

Por todo lo expuesto el ex mandatario consideró que el gobierno de Washington está “en aprietos” por violar los derechos humanos en Honduras. Culminó Zelaya mencionando la paradoja de Estados Unidos hace unas semanas cuando consideró excluir la evaluación de Derechos Humanos en Honduras para analizar si el país centroamericano regresaría a la Organización de Estados Americanos.
En el texto revelado por Wikileaks, la embajada estadounidense en Honduras reconoce que nunca se demostró que el presidente Zelaya haya roto la ley y afirma que el argumento de que intentaba prolongarse en el poder en una suposición.

En el documento se revela que los argumentos esgrimidos por Micheletti y los militares y políticos golpistas “no tienen ninguna validez sustancial” y agrega que “algunas son abiertamente falsas”.

El informe considera que varias de las medidas ejecutadas por los golpistas fueron “patentemente ilegales”, desde el hecho mismo de que “los militares sacaran a Zelaya del país sin autoridad para hacerlo”, algo que “violó múltiples garantías constitucionales, incluyendo la prohibición de expatriación, la presunción de inocencia y el derecho a un proceso legal”.
EE.UU. fue el país que más se tardó en aplicar sanciones tras el derrocamiento de Zelaya, mientras que otros Gobiernos como los de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), y del Mercado Común del Sur (Mercosur), se pronunciaron en contra del golpe casi inmediatamente.

Después de transcurridos 73 días del suceso, EE.UU decidió suspender la ayuda de la Cuenta Reto del Milenio (CRM) para el país centroamericano, estimada en 11 millones de dólares.

Pasado menos de medio año del golpe, la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, restableció las relaciones con Tegucigalpa y reactivó nuevamente la ayuda financiera para el presidente sucesor del régimen de facto, Porfirio Lobo.

"Acabo de escribir una carta al Congreso de Estados Unidos notificando que vamos a restaurar la ayuda financiera a Honduras", manifestó Clinton durante su participación en la III Reunión Ministerial Caminos a la Prosperidad en las Américas, realizada en San José, Costa Rica, en marzo pasado.
El ex presidente Manuel Zelaya fue derrocado en un golpe de Estado el 28 de junio de 2009 ejecutado por efectivos militares de su país.

Posteriormente, fue desterrado en Costa Rica pero retornó clandestinamente a Honduras algunos meses después y se refugió en la embajada brasileña en Tegucigalpa hasta que asumió el poder Porfirio Lobo en enero de 2010, momento en el cual se exilió en República Dominicana.
 
teleSUR/rp-FC

Wikileaks revela informe confidencial de EE.UU un mes después del golpe en Honduras Un informe confidencial de la embajada de Washington en Honduras revelado este domingo por Wikileaks muestra que Washington no tiene duda de que en Honduras hubo golpe de Estado contra el entonces presidente, Manuel Zelaya, y agrega que "los militares, la Corte suprema y el Congreso Nacional conspiraron el 28 de junio en lo que constituyó un golpe ilegal e inconstucional contra el Ejecutivo".

De igual manera en el texto, la embajada de Estados Unidos en Honduras afirma que el gobierno de Roberto Michelleti fue completamente ilegítimo.

"No hay duda de que desde nuestra perspectiva no hay duda de que la llegada al poder de Roberto Micheletti ha sido ilegítima“, destaca el informe enviado desde la Embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa, en nombre de su responsable, el embajador Hugo Llorens.

La embajada afirma en los mensajes que los argumentos esgrimidos por los “defensores del golpe del 28 de junio” son “a menudo ambiguos”, por lo que dice haber consultado a  "expertos en legislación en Honduras” pero añade entre paréntesis que “(uno no puede encontrar una visión profesional no sesgada en una Honduras con un clima políticamente cargado)”.

En el texto revelado por Wikileaks, la embajada estadounidense en Honduras reconoce que nunca se demostró que el presidente Zelaya haya roto la ley y afirma que el argumento de que intentaba prolongarse en el poder en una suposición.

En el documento se revela que los argumentos esgrimidos por Micheletti y los militares y políticos golpistas “no tienen ninguna validez sustancial” y agrega que “algunas son abiertamente falsas”.

El informe considera que varias de las medidas ejecutadas por los golpistas fueron “patentemente ilegales”, desde el hecho mismo de que “los militares sacaran a Zelaya del país sin autoridad para hacerlo”, algo que “violó múltiples garantías constitucionales, incluyendo la prohibición de expatriación, la presunción de inocencia y el derecho a un proceso legal”.

En el último de los comentarios, se dice que “no importa cuáles sean los puntos fuertes del caso contra Zelaya, su salida forzada del país por parte de los militares fue claramente ilegal, y el acceso de Micheletti como “presidente interino” fue totalmente ilegítimo”.

Entre los destinatarios de este informe, aparece el embajador de Estados Unidos en Brasil en ese momento, Thomas A. Shannon, y el asistente especial de Barack Obama y director para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, Dan Restrepo.

La información suministrada por estos documentos dan luz para entender declaraciones emitidas en agosto de 2009 por el presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, cuando expresó su deseo de que el embajador de Estados Unidos en ese país, Hugo Llorens, no vuelva a retomar el cargo, luego que el Gobierno norteamericano decidiera retirarlo por supuestos "motivos personales"

EE.UU. fue el país que más se tardó en aplicar sanciones tras el derrocamiento de Zelaya, mientras que otros Gobiernos como los de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), y del Mercado Común del Sur (Mercosur), se pronunciaron en contra del golpe casi inmediatamente.

Después de transcurridos 73 días del suceso, EE.UU decidió suspender la ayuda de la Cuenta Reto del Milenio (CRM) para el país centroamericano, estimada en 11 millones de dólares.

Pasado menos de medio año del golpe, la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, restableció las relaciones con Tegucigalpa y reactivó nuevamente la ayuda financiera para el presidente sucesor del régimen de facto, Porfirio Lobo.

"Acabo de escribir una carta al Congreso de Estados Unidos notificando que vamos a restaurar la ayuda financiera a Honduras", manifestó Clinton durante su participación en la III Reunión Ministerial Caminos a la Prosperidad en las Américas, realizada en San José, Costa Rica, en marzo pasado.

Zelaya siempre sotuvo que EE.UU. intervino en el golpe

El ex presidente Zelaya comentó durante la entrevista con teleSUR el pasado mes de junio, que mientras fue mandatario de Honduras, Estados Unidos se incomodaba cuando se mostraba solidario o  mantenía relaciones con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez; el de Bolivia, Evo Morales: el de Ecuador, Rafael Correa, y otros Gobiernos que discuten las ideas del país del norte.

''Estados Unidos me prohibía, prácticamente, que tuviese relación con Evo Morales, Hugo Chávez, Rafael Correa.  Era una molestia cuando yo establecía estas relaciones de solidaridad con estos pueblos, con Cuba, precisamente cuando defendíamos el derecho que tienen los pueblos y nuestra sociedad de mantener niveles de dignidad y democracia'', señaló.

Por último, agregó que la actual injerencia de EE.UU obstaculiza el proceso de reconciliación nacional.

''Si Estados Unidos saca sus manos de Honduras, los hondureños podemos entendernos'', enfatizó Zelaya.

El ex presidente Manuel Zelaya fue derrocado en un golpe de Estado lel 28 de junio de 2009 ejecutado por efectivos militares de su país.

Posteriormente, fue desterrado en Costa Rica pero retornó clandestinamente a Honduras algunos meses después y se refugió en la embajada brasileña en Tegucigalpa hasta que asumió el poder Porfirio Lobo en enero de 2010, momento en el cual se exilió en República Dominicana.
 
teleSUR - Periodismo Humano / FC/YR

Filtraciones de Wikileaks revelan injerencia norteamericana en Latinoamérica y acciones contra Cuba
Uno de los cables, firmado por “CLINTON”, solicita información sobre candidaturas cubanas, iraníes o sirias para cualquier posición de liderazgo en Naciones Unidas”.
La pupila insomne |
Indicaciones del Departamento de Estado que recaban información sobre la actividad de Cuba en instancias de la ONU entre los documentos filtrados. Indicaciones del Departamento de Estado que recaban información para limitar actividad de Cuba en instancias de la ONU entre los documentos filtrados.
Cable, firmado por CLINTON, en el que el Departamento de Estado pide información confidencial sobre actividades en ONU (en amarillo menciones a Cuba)

Han comenzado a conocerse las filtraciones de Wikileaks, a través de grandes medios como The New York Times, The Guardian, Der Spiegel, Le Monde, y El País. Aunque algunos analistas han llamado la atención acerca de que ninguno de los diarios privilegiados por Wikileaks, ante el ciberataque que le ha impedido publicar las filtraciones en su página web, mantiene posiciones críticas hacia la política exterior norteamericana, y que en especial el diario español sólo ha publicado un resumen y una pequeña selección. En la red social Twitter se  estableció la etiqueta #cablegate para referirse al tema.
Telesur reporta que son datos requeridos, según se desprende de la lectura de varios documentos, para reemplazar archivos existentes en el Departamento de Estado desde 2004 y, en el caso de uno de los países afectados por la investigación, Paraguay, se solicita información más propia de una ficha policial: el escáner del iris, huellas dactilares y el ADN de cuatro candidatos presidenciales.
En particular las revelaciones sobre América Latina revelan que las embajadas de Estados Unidos funcionan como centros de vigilancia por órdenes del Departamento de Estado. Los documentos secretos publicados este domingo, donde se muestran, entre otros, los esfuerzos de Washington por aislar diplomáticamente al presidente venezolano Hugo Chávez y la solicitud de información sobre la salud mental de la presidenta de Argentina, además de la interferencia en las elecciones de Paraguay.
Según muestran los  250 mil documentos filtrados, algunas comunicaciones hablan sobre  “los esfuerzos por cortejar a países de América Latina para aislar al venezolano Hugo Chávez”. De 251 mil mensajes revelados por Wikileaks, cuatro mil 155 se refieren a Venezuela según indicó el periódico británico The Guardian.
Del mismo modo se menciona en los documentos, “las sospechas que la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, despierta en Washington, hasta el punto de que la Secretaría de Estado llega a solicitar información sobre su estado de salud mental”. En todos los documentos quedan en evidencia “las permanentes presiones que se ejercen sobre los diferentes gobiernos, desde Brasil a Turquía, para favorecer los intereses comerciales o militares de Estados Unidos”.
El cometido de algunas embajadas es casi policial, y la solicitud del Departamento de Estado a su embajada en la Asunción es una muestra de ello, debiendo acumular datos físicos de los aspirantes a la presidencia de Paraguay en las elecciones de abril del 2008. Uno de los mensajes publicado recaba datos biométricos , huellas dactilares, fotografías, escáneres del iris, ADN “y otras singularidades” de la entonces ministra de Educación, Blanca Ovelar, al ex vicepresidente Luis Alberto Castiglioni, al ex general Lino Oviedo y a Fernando Lugo, actual presidente. La Secretaría de Estado solicita información a su delegación en la Asunción sobre la corrupción oficial, el lavado de dinero, las relaciones de Paraguay con Cuba, Venezuela, China, Taiwán y Rusia. Un punto que llama la atención es la solicitud de información sobre la existencia de yacimientos de hidrocarburos en la región del Chaco paraguayo. De igual manera solicitó información sobre la construcción de mezquitas en el país latinoamericano.
Acciones para limitar actividad de Cuba en la ONU

La información solicitada por el Departamento de Estado alcanza todos los aspectos de la política, la economía y las relaciones sociales de Latinoamérica. Uno de los cables, firmado por “CLINTON”, solicita información acerca de los contactos de “países miembros del Consejo de Seguridad de la  ONU y otros estados miembros sobre candidaturas cubanas, iraníes o sirias para cualquier posición de liderazgo en Naciones Unidas”.