jueves, 18 de noviembre de 2010

INFORMACIONES HONDURAS ( nr 598 ) 18 noviembre 2010

Acusarán a Facussé por 19 asesinatos a campesinos y denunciarán al FMI, BCIE y BID por financiarlo
Miércoles 17 de Noviembre de 2010  Red Morazánica de Información


Tegucigalpa, MDC, 17 Noviembre 2010. El presidente del  Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (Codeh), Andrés Pavón,  informó, hoy, que promoverá una denuncia contra el empresario Miguel Facussé,  por 19 asesinatos cometidos contra campesinos en El Aguan.
Andrés Pavón hizo un llamado a las organizaciones de derechos humanos y a los particulares que se han pronunciado sobre  el  “abominable  y horrendo crimen”   contra cinco  campesinos en El Aguán, para “acusar formalmente por el delito de asesinato  al señor Facussé Barjun”.

Propuso, además,  denunciar al concurso de las naciones al Fondo Monetario Internacional (FMI), al Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), el Banco Internacional de Desarrollo  (BID), “porque  están financiando un crimen en El Aguán”.

Explicó que   con “los préstamos que le están facilitando a este hombre [Facussé], que se ha constituido en el criminal número uno de América Latina, por ahora, con la posibilidad de organizar un ejército que en este momento, se está paseando visiblemente en las calles del Aguan, en  Tocoa, en Trujillo y generando actos de terror en las diversas cooperativas del sector agrario de la palma en el Aguán”.

Anunció que el Codeh ya tiene un escrito que hará circular por Internet,  para ver cuántas organizaciones se adhieren a él. “Porque es necesario pasar a la práctica.  Una vez que hemos dicho que ese es un crimen y que este tiene un ejército allí, hay que presentar los recursos correspondientes”.
Hay que decirle a la comunidad internacional que aquí hay impunidad, que aquí  hemos agotado la jurisdicción interna  y acudir al Consejo de Derechos Humanos y al Consejo  Económico y Social, ambos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), y a las organizaciones internacionales como el FMI y el BID,  “para denunciar a este hombre que con ese dinero esta organizando un ejército y esta contratando sicarios de otros países”, dijo.

Agregó, “se está constituyendo en una forma de regionalizar el paramilitarismo,  porque los que hasta ayer llegaron [al Aguán], militares y policías, no han llegado a proteger a los campesinos, ha llegado  a protegerlo a él  [Facussé] y a sus intereses”.
Denunció que fue sorprendido cuando el titular del instituto Nacional Agrario (INA), “César Ham fue amenazado públicamente por los mismos funcionarios de este hombre, en un canal de televisión  en  donde, el presentador en ningún momento se refirió al tema del crimen”.

Según Pavón, el comunicador televisivo “pretendió orientar que hay un señor  a quien se le han pretendido  meter a una tierra y éste  ha respondido para sacar a quienes los han agredido”.

Aseguró que no sólo son cinco los muertos, “son 19 crímenes por los que hay que acusar a Facussé Barjun y al mismo FMI, BID, y al BCIE, que también le están prestando dinero para que este hombre arme su propio ejército”.

Pavón argumentó que: “Ese ejército de Facussé no se ha armado con fondos propios de él, sino con préstamos que le han dado la banca nacional y la banca internacional,  y ellos [bancos] son igualmente responsables”.

Al amanecer del  lunes 15 de noviembre  fueron encontrados asesinados cinco miembros del Movimiento Campesino del Aguán (MCA) de la cooperativa Guadalupe Carney, finca El Tumbador, municipio de Trujillo, departamento de Colón.

Las grandes empresas mediáticas  se refieren al  hecho como un “enfrentamiento”, en el que no aparecen más muertos que los campesinos,  cuyos cadáveres fueron  fotografiados  como si hubieran portado fusiles al momento de morir, a simple vista mal colocados en la escena del crimen.

Uno de los fusiles aparece  en el sentido contrario al que usualmente se porta, con el cañón apuntando al muerto y no hacia afuera.

Encuentran a otro campesino ejecutado por sicarios de Miguel Facussé en el Bajo Aguán
17/11/2010 El Libertador
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Esta mañana fue encontrado sin vida al campesino José Luis Sauceda de 32 años, luego que fuera ejecutado por los sicarios del empresario árabe Miguel Facussé Barjum en la finca “El Tumbador”, situada en Trujillo, a 565 kilómetros al este de Tegucigalpa.
Esta mañana fue encontrado sin vida al campesino José Luis Sauceda de 32 años, luego que fuera ejecutado por los sicarios del empresario árabe Miguel Facussé Barjum en la finca “El Tumbador”,  situada en Trujillo, a 565 kilómetros al este de Tegucigalpa. 
El ahora occiso en el momento del levantamiento, presentaba tres impactos de bala de calibre R15 en la cara.
Según el relato de familiares y compañeros de Sauceda, éste había desaparecido en el instante que fueron ejecutados cuatro campesinos a manos de paramilitares, suscitado hace más de 24 horas siempre en la misma finca. 
El difunto deja en la orfandad a un niño de tres años de edad y a su esposa, que conforme al relato recabado, tenían la esperanza de encontrar con vida al labriego luego del enfrentamiento.

Carta de José Manuel Zelaya sobre asesinatos en el Bajo Aguán y su retorno

voselsoberano.com |
Santo Domingo, 17 de noviembre de 2010

Compañeros y Compañeras;
Resistencia Nacional;
Pueblo Hondureño:

http://english.safe-democracy.org/wp-content/uploads/2009/07/zelayahonduras1.jpg Escribo en este momento difícil para los campesinos del MUCA, el MCA y el MARCA  y  para todo el pueblo hondureño, abatido por la miseria,  y la muerte que nos han  impuesto  este sistema basado en el lucro y sostenido  desde las esferas de poder en Washington.

En  general, pienso que es importante tener siempre en mente donde está, las raíces de nuestros problemas,  como se sostiene y quien es el causante del dolor sin límite que ahora nos infringen.


Estados Unidos hizo ayer un comunicado celebrando la masificación de la presencia militar en la zona, e incluso tuvo la desfachatez de insinuar que los caídos no eran campesinos. Estoy seguro que el pueblo Norteamericano no apoyara esta política pública de violación flagrante a los DDHH, pues nunca ha sido tan evidente la estrategia  de represión y  exterminio político que se ha emprendido en Honduras, contra los ciudadanos que defienden el derecho inalienable de participar como le corresponde en la vida nacional.

Expreso mi profundo pesar, y mi solidaridad incondicional con las familias de los caídos en el Tumbadero. De nuevo  se  le quiere dar tinte empresarial a un acto de sangre; ¿hasta cuándo tendremos que soportar que se asesinen hondureños en nombre de la propiedad privada? Estos son  actos cobardes, que además les sirven para una militarización ilimitada e incontrolada del estado; represión, persecución, asesinatos, masacres, son  como parte de la estrategia de eliminación de la oposición real en el país.

El pueblo tiene derecho a la defensa, nos ha sido consagrado en constituciones de todos los tiempos, y nos la hemos ganado con nuestro proceder pacifico; aun ante la violencia que solo los insensatos  no quieren ver.

No podemos aceptar que hermanos masacren hermanos defendiendo los intereses de unos pocos  terratenientes por los azares del mercado. Es imperativo que procedamos a manifestar con fuerza, y por todos los medios, nuestro rechazo al sacrificio y martirio de nuestro pueblo; esto solo es posible con el accionar militante, determinado, valiente de todos los miembros de las organizaciones sociales y políticas que integren el  Frente Nacional de Resistencia Popular.

No podemos anteponer juicios equivocados y personalistas a la obligación histórica de defender la vida.

Tenemos esperanzas en la búsqueda permanente de la verdad y de la justicia;  pero ningún pueblo que quiere emanciparse alcanza su libertad desde la indiferencia o la cobardía.

Es un error pensar que la comunidad internacional resolverá nuestros problemas; el apoyo de ellos es seguramente fundamental, y lo agradecemos todos los días, pero es nuestra propia actitud la que nos llevara por sendas de justicia; Distraernos en interpretaciones superficiales de los hechos, que divulga la oligarquía para tirar cortinas de humo sobre la barbarie en el bajo aguan. Solo nos aleja de la posibilidad de la refundación de Honduras.

Se difunden diferentes especies,  sobre mi regreso, algunos hasta dan fecha, sin dejar a un lado  esta lucha, en la que estamos empeñados, no debemos apartar nuestros ojos del lugar del conflicto, de donde realmente radica la crisis.

Las acciones asesinas contra el pueblo y  contra los compañeros campesinos en cualquier parte de la geografía nacional, no pueden quedar impunes,  en mi nombre y en el de otros, 187 compañeros y compañeras en el destierro, pido al pueblo que se una sin reservas en apoyo a los compañeros campesinos del bajo Aguán y al FNRP.


José Manuel Zelaya

Presidente 2006-2010
Coordinador General, Frente Nacional de Resistencia Popular

¿Un Estado fallido en el Aguán?

voselsoberano.com | Miércoles 17 de Noviembre de 2010



Nuestra Palabra, Editorial Radio Progreso, 17 de noviembre de 2010



Los hechos sangrientos en el último episodio en el Aguán apuntan a una efectiva guerra agraria como resultado de un proceso de negligencias, abuso de autoridad, lentitud, torcimiento de las leyes y respaldo a terratenientes y grandes empresarios por parte del Estado hondureño. Como lo hemos dicho a lo largo de varios años, las tierras que han dado origen a continuados hechos sangrientos hasta culminar en esta franca guerra agraria, se sitúan en el municipio de Trujillo, propiamente en el lugar que ocupó a comienzos de los años ochentas el Centro Regional de Entrenamiento Militar (CREM).
Se trata de más de 5,700 hectáreas de tierra que en 1977, y en un acto violatorio de la Constitución de la República, fueron compradas al Estado por el estadounidense de origen portorriqueño, Temístocles Ramírez. A comienzos de los ochentas, y bajo la presión de la administración estadounidense, el Estado hondureño expropió las tierras para usarlas como base de entrenamiento a tropas de Estados Unidos, hondureñas, salvadoreñas y tropas irregulares conocidas en su tiempo como la contra nicaragüense. Una vez que se suspendieron las actividades militares, Temístocles Ramírez presentó una demanda por las tierras, y el gobierno gringo obligó al Estado hondureño a pagar una indemnización por 17 millones de dólares los cuales se restaron de un préstamo que el mismo gobierno de Estados Unidos había aprobado para Honduras.
Las tierras quedaron entonces bajo la propiedad del Estado hondureño, y por consiguiente, sujetas de reforma agraria, es decir, para que el INA dispusiera de ellas para entregarlas a grupos campesinos organizados. Sin ser tierras ejidales, la municipalidad de Trujillo, las vendió ilegalmente en 1991, a un grupo de terratenientes, casi todos, políticos de oficio o funcionarios públicos. Los campesinos organizados demandaron las tierras, y el Estado hondureño reconoció la ilegalidad de la venta, y procedió a finales de la década de los noventas a indemnizar a los terratenientes para proceder a la entrega de las tierras para procesos de reforma agraria.
El Estado pagó la indemnización, pero los terratenientes no estuvieron conformes, y continuaron en posesión ilegal de las tierras. Miguel Facussé ha cultivado de palma africana al menos 700 hectáreas de la tierra propiedad del Estado, por eso mismo, sujeta de reforma agraria. El propio Facussé lo ha reconocido al extremo de sentarse a una mesa para negociar la entrega de la misma a cambio del pago de las mejoras por parte del Estado. Sin embargo, ninguno de los acuerdos se ha hecho efectivo, dejando así abiertas las condiciones para hechos sangrientos como el que hoy estamos lamentando.
Las noticias presentan a los campesinos como invasores, ¿Y a Miguel Facussé en qué categoría lo colocamos si en los hechos ocupa tierras legalmente destinadas para otros fines?. Las noticias se afanan en presentar los datos como si se tratara de un conflicto estrictamente armado, ocultando así una guerra agraria que hace muchos años se pudo evitar si el Estado hubiese procedido con prontitud y apegado a las leyes del país. Existe una tendencia perversa de querer atizar por la vía militar y de seguridad policial lo que sólo se debe resolver por la vía agraria. El conflicto en el Aguán se ha escapado de las manos del Estado.
Las fuerzas privadas e irregulares que existen y se mueven en esta región del atlántico, parecen tener mucho más poder para tomar decisiones que, en los hechos, las sitúa por encima de un Estado cuyas instituciones se pueden declarar con toda propiedad como fallidas. Por consiguiente, en esa región existe la necesidad urgente para que todos los sectores de la sociedad exijamos apurar un proceso hacia un pronto pacto social con mínimos consensos sobre la tenencia de la tierra. La tarea es completamente urgente y de altísima prioridad política, si es que de verdad queremos detener el baño de sangre que ya esta resultando imparable.




Lucha armada o proceso electoral: una falsa discusión (Debate al interior del FNRP)

voselsoberano.com | Miércoles 17 de Noviembre de 2010

El método fundamental de la lucha del proletariado contra la burguesía, es decir contra su poder gubernamental, es ante todo el de las acciones de masas…La lucha de las masas constituye todo un sistema de acciones en vías de desarrollo, que se avivan por su forma misma y conducen lógicamente a la insurrección contra el estado capitalista.

(Los primeros cuatro congresos de la Internacional Comunista)

El Frente Nacional de Resistencia Popular, está cruzado por un debate que hasta ahora ha sido mal planteado, nos referimos a la táctica para la “toma del poder”. El debate ha sido planteado en blanco o negro: lucha armada o elecciones. Dejando por fuera a sectores que no coincidimos, por lo menos en este momento con ninguna de las dos tácticas y que sí estamos de acuerdo con la lucha por la toma del poder obrero y popular. En el fondo, este debate oculta otro más profundo: el abandono del método histórico de la clase trabajadora para la toma del poder como es la huelga general insurreccional.



Para el Partido Socialista de los Trabajadores (PST), la lucha armada es una táctica militar, que el pueblo organizado puede decidir en momentos en que la realidad lo plantee como una necesidad concreta y coincidimos que la lucha armada clásica para la toma del poder, no esta planteada en la coyuntura. Hablamos de lucha armada clásica para diferenciarla de aquellos momentos en que hemos realizado lucha armada con piedras, molotov, palos, ondas, llantas quemadas, derribamiento de muros y verjas, barricadas de piedra y otras acciones, tal como lo ha hecho el Magisterio para defender sus conquistas o como ocurrió el 22 de septiembre con el ingreso de Mel Zelaya; pero alienados con la idea de que la lucha armada sólo se hace con fusiles, hemos invisibilizado estos procesos o hemos llegado a la falsa conclusión de que sin fusiles no puede haber insurrección popular. En Nicaragua la insurrección de masas fue armada pero sólo el Frente Sandinista, específicamente su brazo militar armado, tenía fusiles; en Honduras, los tacamiches realizaron una lucha armada por tres años y nadie lo advirtió porque la realizaron sin fusiles, pero los cuerpos represivos del Estado temían a su ejército de “onderos”. Pero insistimos, si se entiende lucha armada por guerra popular y prolongada con ejército de liberación y fusil en mano, no hay condiciones para realizarla en este momento.

Frente a la imposibilidad de la “lucha armada”, nos quieren hacer creer que la única alternativa que nos queda son las elecciones. Otro error, las elecciones son una táctica no son una estrategia de lucha, es decir, no son el fin último para la toma del poder. Nosotros no satanizamos las elecciones, de hecho, impulsamos con todas nuestras fuerzas la candidatura independiente de Carlos H. Reyes a la presidencia de la República pero como los procesos electorales son tácticos, en el momento en que valoramos que las elecciones le hacían el juego a los golpistas, también fuimos los primeros en plantear que había que retirarse, coincidiendo con otros sectores y el mismo candidato, finalmente la candidatura se retiró y pasó a convertirse en una estructura más de la resistencia contra el golpe de Estado.

La coyuntura por la que desistimos de utilizar la táctica electoral no ha pasado, el golpismo ha ido fortaleciendo posiciones que han desembocado en una violación sin precedentes a los derechos humanos y en un ataque despiadado a las conquistas de la clase trabajadora. En este momento privilegiar las elecciones como táctica para la toma del poder, significa oxigenar a Pepe Lobo y a la oligarquía golpista que lo rodea, significaría aceptar que nos equivocamos el 29 de noviembre de 2009 y que debimos mantener la candidatura independiente pero además, significaría que se equivocaron todos los que renunciaron a sus candidaturas.

Quienes en este momento postulan participar en elecciones, no entienden que las razones que fundamentaron el retiro de la candidatura independiente dio lugar a uno de los golpes más duros al bipartidismo; el ejemplo del 29 de noviembre llevó a muchos sectores del pueblo a elevar su conciencia de clase y a considerar que las elecciones eran la trinchera de la oligarquía y que la lucha popular es la alternativa definitiva para la liberación nacional.

Por ahora la tarea del frente es avanzar hacia la constituyente pero dejando claro que la lucha por la misma debe plantearse en términos de lucha popular revolucionaria, es devolverle a la resistencia el carácter insurreccional que le quitaron a base de un pacifismo absurdo en momentos en que había que arreciar con todas nuestras fuerzas.

Hay compañeros, que de manera muy franca plantean que pasamos seis meses en las calles y no tomamos el poder, si vemos las cosas en su apariencia, nos sentimos tentados a darles la razón pero, en esencia, esas movilizaciones no fueron concebidas para la toma del poder; su objetivo fue desarticular, mediante un pacifismo absurdo, el carácter insurreccional que se estaba gestando en todo el país.

El PST, en este proceso de lucha, no descarta utilizar la táctica electoral pero sólo a condición de que se convierta en una trinchera de lucha y no en un espejismo que deforme la conciencia del pueblo, desviando la lucha de clases al terreno político de la oligarquía. Por ahora creemos que nuestra táctica pasa por unir, fortalecer y preparar la lucha popular por la constituyente. Ahora bien, esta lucha por la constituyente debe estar ligada al reagrupamiento de todos los sectores que están en lucha, En este momento, cada sector está defendiendo sus intereses de manera aislada, por esta razón el PST, esta planteando la necesidad de un gran encuentro obrero, campesino y popular que estructure un plan de lucha único para enfrentar el plan económico pro oligárquico y fondomonetarista del gobierno de Lobo Sosa.

Consideramos que los sectores que tenemos estas coincidencias debemos sentarnos a dialogar para profundizar el análisis y afinar una estrategia común para plantearla como una alternativa al Frente Nacional de Resistencia Popular.

Partido Socialista de los Trabajadores

PST

17 de noviembre de 2010