México se prepara para hacer frente al problema de migración masiva, ante la denominada “Caravana Madre”, que se está formando en Honduras con un contingente que se estima podría llegar a ser de más de 20 mil personas.Por: Redacción CRITERIO
Con información de Notimex
La secretaria de Gobernación de México, Olga Sánchez Cordero, expuso lo anterior en el marco de la XXXII Consulta Nacional Jurídica y Fiscal ara Iglesias y Asociaciones Religiosas, organizada por Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Cofraternice).
En entrevista con los medios de comunicación, la funcionaria federal explicó que este fue uno de los temas centrales que abordó en la reunión que sostuvo con la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kisrstjen Nielsen.
Reveló que, durante este encuentro, la funcionaria estadunidense informó que en febrero pasado devolvieron al menos 76 mil migrantes a sus países, mientras que para marzo se estima que la cifra se eleve a más de 90 mil migrantes.
Actualmente, se tiene conocimiento de que al menos dos mil 400 personas se han unido a una nueva caravana y de que en Honduras se preparan para lo que han denominado la “Caravana Madre”, con 20 mil migrantes.
De continuar esta situación, explicó Sánchez Cordero, al final del año serían cerca de 900 mil migrantes cruzando a Estados Unidos, lo cual representa una situación compleja para México por ser un país de tránsito.
Mencionó que recientemente The Wasington Post documentó que existe una ruta de camiones que garantiza a los migrantes su traslado de Tapachula a la frontera norte de México, situación que calificó como inaceptable, ya que se trata de una mafia que está generando el desbordamiento de la migración.
Nota relacionada Se prepara caravana de migrantes con 15 mil personas saliendo de Honduras
La funcionaria federal manifestó su preocupación por esta situación, ya que muchas veces este tráfico es un negocio que lleva a cabo una organización criminal a la que le podría generar “varios billones de dólares”.Ello, ya que cada migrante representa entre dos mil y seis mil dólares para estos criminales, cantidad que si se multiplica por cada persona que piensa ingresar en los próximos días incrementa considerablemente, lo que representa un problema ilegal que debe atenderse con prioridad, subrayó.
Ante esta situación, Sánchez Cordero anunció que se buscará establecer orden en los mil 20 kilómetros de la frontera sur del país, donde existen 370 puntos ilegales de migración y solo 12 puntos legales, para evitar el ingreso masivo y desordenado de migrantes al país.
En ese sentido, recordó que México tiene un flujo migratorio circular que no se puede detener ni blindar, el cual representa un intercambio de cerca de un millón 500 mil personas que ingresan al país para trabajar y comerciar, al igual que ocurre en puntos como San Isidro y Tijuana, o MacAllen y Reynosa.
Para garantizar que este flujo migratorio continúe y evitar que la migración ilegal se dispare, se implementará en lo más estrecho del país, en los 200 kilómetros del Istmo de Tehuantepec, instalaciones migratorias con la participación de la Policía Federal y Protección Civil.
Asimismo, se abrirá un carril exprés para permitir que los extranjeros que forman parte del flujo migratorio circular lo hagan sin problema y de forma regular, además de que ya no se darán visas humanitarias de forma masiva, sino que se darán permisos temporales de visitante y de trabajo en todo el sureste del país.
De esta manera, se busca hacer frente y revertir el problema del desbordamiento de migración, cuya situación ya se encuentra colapsada en el norte del país debido a la cantidad de migrantes que se resguardan en los albergues.
Además, se combatirá el tráfico de menores y de órganos, entre otros delitos que se generan por la migración descontrolada e ilegal, concluyó la titular de la Secretaría de Gobernación.
EE.UU.: La frontera sur está en "punto de quiebre" ante la llegada "sin precedentes" de migrantes centroamericanos
Publicado: 29 mar 2019 01:44 GMT - RT
El titular de la oficina de Protección
Aduanera y Fronteriza (CBP) dijo que debido a la cantidad de gente que
se ha aglomerado en la frontera "es cuestión de tiempo" que ocurra una
tragedia.
La
frontera entre EE.UU. y México está en un "punto de quiebre" debido a
un aumento "sin precedentes" de migrantes centroamericanos, de acuerdo
con funcionarios estadounidenses.
Así lo reconoció Kevin McAleenan, comisionado de Protección Aduanera y Fronteriza (CBP), quien durante una visita por El Paso, en Texas (EE.UU.), señaló que es solo "cuestión de tiempo" que ocurra una tragedia en uno de los centros instalados por el Gobierno estadounidense.
"La CBP se enfrenta a una crisis humanitaria y de seguridad fronteriza sin precedentes
en toda nuestra frontera suroeste y en ninguna parte esa crisis se ha
manifestado más agudamente que aquí, en El Paso", dijo McAleenan.
El funcionario señaló que el número de detenidos en los últimos días, entre el 24 y 26 de marzo, fue superior a los 13.000 migrantes. Un hecho que consideró inédito. "Un número alto para nosotros es 4.000. El nivel de crisis es 6.000. 13.000 no tiene precedentes", dijo McAleenan.
En este sentido, McAleenan comentó que la CBP está en camino de cerrar marzo con más de 100.000 migrantes retenidos, la cifra más alta registrada desde 2008. Una situación que ha provocado que 750 agentes dejen sus funciones en puertos de entrada para atender la crisis humanitaria en los centros de detención.
Una situación que supone que los migrantes y sus familias tengan "casi garantizado el ser liberados para permanecer en los EE.UU. por tiempo indefinido".
Esto, debido a que la Policía y el Servicio de Aduanas (ICE) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) aún no tienen la capacidad de detener a familias y niños, según las autoridades.
"Estamos haciendo todo lo posible para simplemente evitar una tragedia. Pero con estos números, con los tipos de enfermedades que estamos viendo, me temo que es solo una cuestión de tiempo", dijo.
McAleenan también indicó que la CBP tiene registro de 40.000 menores no acompañados que cruzaron la frontera en marzo y fueron puestos en custodia por el Gobierno de EE.UU.
A comienzos de marzo, el congresista de EE.UU. Ted Deutch reveló que, de acuerdo con documentos oficiales, al menos 154 empleados del Gobierno estadounidense fueron acusados de cometer abuso sexual contra niños migrantes no acompañados.
Durante el encuentro, las funcionarias hablaron sobre la manera en que al menos 2.400 personas se han unido a una nueva caravana desde Centroamérica con rumbo a los EE.UU. Además de que en Honduras se preparan para lo que han denominado la "caravana madre", que se prevé cuente con cerca de 20.000 migrantes.
Sánchez Cordero reveló que durante la reunión que sostuvo con su homóloga estadounidense, Nielsen le comentó que el Gobierno de EE.UU. deportó al menos 76.000 migrantes a sus países en febrero pasado, mientras que para marzo se estima que el número se eleve a más de 90.000 migrantes.
Una cifra que, de mantenerse así, implicaría que casi un millón de migrantes centroamericanos lleguen a la fontera norte de México para cruzar a EE.UU. a finales de 2019.
La titular de la Secretaría de Gobernación mexicana también dijo tener conocimiento de una ruta de camiones que garantiza a los migrantes centroamericanos su traslado desde la ciudad de Tapachula, Chiapas, ubicada en la frontera sur de México, hasta el norte del país, situación que calificó como inaceptable, al tratarse de un factor que contribuye a desbordar la migración.
Sin embargo, Sánchez Cordero indicó que no está previsto militarizar la frontera sur para contener la migración.
Así lo reconoció Kevin McAleenan, comisionado de Protección Aduanera y Fronteriza (CBP), quien durante una visita por El Paso, en Texas (EE.UU.), señaló que es solo "cuestión de tiempo" que ocurra una tragedia en uno de los centros instalados por el Gobierno estadounidense.
El funcionario señaló que el número de detenidos en los últimos días, entre el 24 y 26 de marzo, fue superior a los 13.000 migrantes. Un hecho que consideró inédito. "Un número alto para nosotros es 4.000. El nivel de crisis es 6.000. 13.000 no tiene precedentes", dijo McAleenan.
En este sentido, McAleenan comentó que la CBP está en camino de cerrar marzo con más de 100.000 migrantes retenidos, la cifra más alta registrada desde 2008. Una situación que ha provocado que 750 agentes dejen sus funciones en puertos de entrada para atender la crisis humanitaria en los centros de detención.
Familias y niños no acompañados
Por otro lado, el funcionario estadounidense comentó que a diferencia de lo que ocurría en el pasado, cuando la mayoría de los migrantes que buscaban entrar a EE.UU. eran adultos solteros, el hecho de que ahora sean familias enteras ha generado mayores complicaciones para deportar a los migrantes centroamericanos.Una situación que supone que los migrantes y sus familias tengan "casi garantizado el ser liberados para permanecer en los EE.UU. por tiempo indefinido".
Esto, debido a que la Policía y el Servicio de Aduanas (ICE) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) aún no tienen la capacidad de detener a familias y niños, según las autoridades.
"Estamos haciendo todo lo posible para simplemente evitar una tragedia. Pero con estos números, con los tipos de enfermedades que estamos viendo, me temo que es solo una cuestión de tiempo", dijo.
McAleenan también indicó que la CBP tiene registro de 40.000 menores no acompañados que cruzaron la frontera en marzo y fueron puestos en custodia por el Gobierno de EE.UU.
A comienzos de marzo, el congresista de EE.UU. Ted Deutch reveló que, de acuerdo con documentos oficiales, al menos 154 empleados del Gobierno estadounidense fueron acusados de cometer abuso sexual contra niños migrantes no acompañados.
La "caravana madre" con 20.000 migrantes
En días recientes, la secretaria de Gobernación de México, Olga Sánchez Cordero, se reunió con la secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU., Kirstjen Nielsen.Durante el encuentro, las funcionarias hablaron sobre la manera en que al menos 2.400 personas se han unido a una nueva caravana desde Centroamérica con rumbo a los EE.UU. Además de que en Honduras se preparan para lo que han denominado la "caravana madre", que se prevé cuente con cerca de 20.000 migrantes.
Sánchez Cordero reveló que durante la reunión que sostuvo con su homóloga estadounidense, Nielsen le comentó que el Gobierno de EE.UU. deportó al menos 76.000 migrantes a sus países en febrero pasado, mientras que para marzo se estima que el número se eleve a más de 90.000 migrantes.
Una cifra que, de mantenerse así, implicaría que casi un millón de migrantes centroamericanos lleguen a la fontera norte de México para cruzar a EE.UU. a finales de 2019.
La titular de la Secretaría de Gobernación mexicana también dijo tener conocimiento de una ruta de camiones que garantiza a los migrantes centroamericanos su traslado desde la ciudad de Tapachula, Chiapas, ubicada en la frontera sur de México, hasta el norte del país, situación que calificó como inaceptable, al tratarse de un factor que contribuye a desbordar la migración.
Sin embargo, Sánchez Cordero indicó que no está previsto militarizar la frontera sur para contener la migración.
Trump corta todo el apoyo financiero a Guatemala, Honduras y El Salvador
Publicado: 30 mar 2019 09:56 GMT | Última actualización: 30 mar 2019 18:46 GMT - RT
"No han hecho nada por nosotros", afirmó el
mandatario estadounidense respecto a los países del llamado 'Triángulo
Norte de Centroamérica'.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, decidió poner fin a toda la asistencia directa
al llamado 'Triángulo Norte de Centroamérica', formado por Guatemala,
Honduras y El Salvador, informaron desde el Departamento de Estado del
país.
"Llevamos a cabo instrucciones del presidente y acabamos los programas de asistencia extranjera del año fiscal 2017 y 2018 al Triángulo Norte", indicó este sábado un portavoz del Departamento a ABC News.
Horas antes, el mandatario estadounidense anunció su decisión de dejar de brindar apoyo financiero a estos países. "He terminado los pagos a Guatemala, Honduras y El Salvador. Ningún dinero no será ya destinado allí", señaló.
Trump precisó que los países en cuestión recibieron "enormes cantidades de dinero". "No les pagamos más, porque no han hecho nada por nosotros", subrayó.
Dichos países son las principales fuentes de inmigrantes que llegan al territorio estadounidense. Sin embargo, Washington les asignaba dinero para estabilizar la situación en su territorio, con la idea de cortar el flujo de migración hacia EE.UU. "Su gente se quedará en su país si cree que allí hay un futuro más brillante para ellos", afirmó en octubre pasado el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence.
Con la elección de Trump terminó la época de la supuesta "buena vecindad" de EE.UU. hacia los países latinoamericanos y volvió la vieja doctrina del garrote, cree el analista político y director de 'Dossier Geopolítico', Carlos Alberto Pereyra Mele.
"Llevamos a cabo instrucciones del presidente y acabamos los programas de asistencia extranjera del año fiscal 2017 y 2018 al Triángulo Norte", indicó este sábado un portavoz del Departamento a ABC News.
Horas antes, el mandatario estadounidense anunció su decisión de dejar de brindar apoyo financiero a estos países. "He terminado los pagos a Guatemala, Honduras y El Salvador. Ningún dinero no será ya destinado allí", señaló.
Trump precisó que los países en cuestión recibieron "enormes cantidades de dinero". "No les pagamos más, porque no han hecho nada por nosotros", subrayó.
Dichos países son las principales fuentes de inmigrantes que llegan al territorio estadounidense. Sin embargo, Washington les asignaba dinero para estabilizar la situación en su territorio, con la idea de cortar el flujo de migración hacia EE.UU. "Su gente se quedará en su país si cree que allí hay un futuro más brillante para ellos", afirmó en octubre pasado el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence.
Con la elección de Trump terminó la época de la supuesta "buena vecindad" de EE.UU. hacia los países latinoamericanos y volvió la vieja doctrina del garrote, cree el analista político y director de 'Dossier Geopolítico', Carlos Alberto Pereyra Mele.