viernes, 3 de junio de 2011

INFORMACIONES HONDURAS (nr. 822) 3 junio 2011

Revelaciones de Wikileaks: Ejército hondureño aceptaba un retorno condicionado de Zelaya
June 1, 2011 - 3:52pm




Tomado de “El Faro.net”

Menos de tres semanas después del golpe, los militares temían que los políticos que habían fraguado el golpe los dejaran solos. Por eso consideraban la posibilidad de apoyar un retorno condicionado de Zelaya, y confesaron a la embajada estadounidense su convicción de que "habían sido manipulados por todas las partes" para derrocar al presidente.

Menos de tres semanas después del golpe de Estado en Honduras, el 17 de julio de 2009, la embajada de Estados Unidos mantenía reuniones con actores clave de la crisis política, en un intento por lograr un acuerdo que permitiera el retorno de Manuel Zelaya a la presidencia, en el marco del pacto que promovía el presidente costarricense Óscar Arias.

En ese esfuerzo, el embajador Hugo Llorens habló con el jefe del Estado Mayor de la Fuerza Armada hondureña, general Romeo Vásquez Velásquez, quien le aseguró que estaba dispuesto a apoyar el regreso condicionado de Zelaya.

Bajo instrucciones del Departamento de Estado de Estados Unidos, según muestran cables firmados por Llorens, este mantenía reuniones con figuras hondureñas de la política, la sociedad civil y de negocios, con el fin de convencerlas de que respaldaran el plan de Arias. “Es de fundamental importancia que el régimen de facto de Micheletti entablara serias negociaciones en la próxima mediación liderada por el presidente Arias el 18 de julio en San José”, dice un cable fechado el 17 de julio.

En la información que Llorens enviaba al Departamento de Estado se refleja un Vásquez preocupado por convencer a Estados Unidos de que la actuación de los militares en el golpe había sido producto de una manipulación, pero también aparentemente mintiendo al asegurar que había una orden de captura contra Zelaya, puesto que tanto la Fiscalía como la Corte Suprema habían confesado a la embajada que esa orden nunca se giró.

Vásquez había sido despedido por Zelaya cuatro días antes del golpe de Estado del 28 de junio por rehusarse a colaborar con el referendo que promovía el presidente.

En la reunión del día 17 de julio, el embajador le reiteró al ya restituido Vásquez que la posición del gobierno de Estados Unidos era que se restituyera el orden democrático y constitucional y que por lo tanto se restableciera a Zelaya como el presidente legítimo de Honduras. Para la embajada la mejor opción para lograr esto era llegar a una solución negociada a través del Acuerdo de San José ya que este también tomaba en cuenta las preocupaciones de los opositores de Zelaya.

La reacción de Vásquez ante la posición de Estados Unidos fue defender su participación en el golpe, argumentando que los militares solo habían seguido órdenes de la Corte Suprema. Pero su posición cambió durante la conversación. “Al final, dijo él (Vásquez), que las Fuerzas Armadas de Honduras habían sido manipuladas por todas las partes”, se lee en el cable 217183, firmado por el embajador.

Luego, Vásquez llega a ponerse del lado del presidente derrocado y asegura que solo participó en el golpe por órdenes de la Corte Suprema. “Él (Vásquez) dijo que siempre había sido leal al presidente Zelaya, pero que la orden de la Corte Suprema era constitucional”, dice el texto del cable.

En otro cable, Vásquez le aseguró al embajador que a pesar de las diferencias, consideraba a Manuel Zelaya como un amigo.

En la nota, donde se relata sobre la reunión con el jefe del Estado Mayor un día antes de las negociaciones en San José, el embajador menciona que Romeo Vásquez Velásquez, a menos de tres semanas del golpe, ya estaba dispuesto a apoyar el regreso de Zelaya bajo las condiciones sugeridas por Arias.”Vásquez expresó su voluntad de apoyar una resolución negociada y la restitución de Zelaya, pero destacó que las Fuerzas Armadas estaban preocupadas de que los políticos civiles los convirtieran en el chivo expiatorio del golpe y la crisis”, se lee en el cable.

En esta misma reunión Vásquez le aseguró al diplomático que llevaría el mensaje de aceptar el Acuerdo de San José a Micheletti y su equipo. Sin embargo, el militar se lamentó ante Llorens que estos eran testarudos y agresivos y que continuaban endureciendo sus posiciones.

Mientras directivos de las Fuerzas Armadas se reunían con la embajada y se mostraban abiertos al regreso condicionado de Zelaya, Roberto Micheletti, presidente de facto, se negaba a considerar esa opción. Micheletti aseguró en varias ocasiones que si Zelaya regresaba a Honduras “había una orden de captura en contra de él".

No fue hasta tres meses después del golpe cuando Micheletti aceptó por primera vez en público la posibilidad de un retorno. A finales de octubre dijo que el Congreso decidiera si Zelaya era restituido o no. Al Congreso le tomó un mes llegar a la decisión de rechazar el regreso de Zelaya.

El temor que las Fuerzas Armadas tenían a ser utilizados como chivo expiatorio por parte de los civiles involucrados en el golpe también salió a relucir en otros cables y era el principal motivo que estos argumentaban para dar apoyo al posible regreso de Zelaya. Los líderes del Congreso aseguraron en diferentes momentos y en diferentes entrevistas que los militares se habían sobrepasado al exiliar al presidente, pues la orden de la Corte era solo de captura. Esas expresiones, el parecer, hacían temer al ejército que si el golpe se revertía, los políticos terminaran responsabilizando a los militares.

El mismo día de la reunión con Vásquez, el embajador Hugo Llores desayunó con el ex presidente hondureño Ricardo Maduro. En un cable titulado “Quién es quién en el golpe de Honduras” Llorens lo califica como una persona de alta influencia y de un rol potencialmente muy útil para la embajada ya que es muy respetado dentro de Honduras y en la comunidad de negocios internacional.

La mañana antes de la reunión en San José, el ex presidente hondureño le contó a Llorens que recientemente se había reunido con líderes militares. Estos le habían expresado que temían ser el chivo expiatorio de la crisis en el caso de que se llegara a un acuerdo político. Si esto sucedía, los militares dijeron estar dispuestos a apoyar a Zelaya.

“Líderes militares le dijeron a Maduro que estaban preparados para apoyar a Zelaya como su comandante en jefe, cualesquiera fueran sus órdenes, en el evento de que los militares fueran culpados por el golpe", se lee en un cable del 18 de julio de 2009 también firmado por Llorens.

En diferentes cables la embajada estadounidense menciona a los militares como un jugador clave en el escenario político después del derrocamiento, a pesar de que Llorens, en un cable donde hace un análisis de los sucesos del 28 de junio, califica de ilegal la actuación de los militares en el golpe. En esa misma nota, la embajada destaca que el asesor legal de las Fuerzas Armadas, Herberth Bayardo Inestroza, reconoció en una entrevista del 5 de julio para El Faro que los militares habían cometido un ilícito al remover a Zelaya.

Para la embajada estos reconocimientos públicos eran de gran valor porque los veía como un paso adelante en las negociaciones alrededor del acuerdo de San José y en el cable. Por ello, en un cable del 28 de julio el embajador resaltó como un gran paso adelante el que los militares hayan declarado públicamente el 25 de julio su apoyo a un acuerdo negociado. En otro cable, Llorens destaca que Vásquez declaró públicamente su apoyo al acuerdo de San José.

Llorens creía que los militares, y especialmente Vásquez, estaban divididos en cuanto a cómo proceder en la crisis, sobre todo porque temían quedar como los villanos de la historia, como comenta en el cable 217183. Según el análisis de Llorens, Vásquez veía en Estados Unidos una guía para salir del problema y por ello confiaba en que llevaría el mensaje de la embajada a Micheletti.

Sobre todo, la embajada creía que debía mantener informados a los militares sobre el desarrollo de las negociaciones. “Cualquiera sea el trato que se haga, para que este sea exitoso, se tienen que mantener informados a los líderes militares”, comentó Llorens en el mismo cable.




Una organización de lucha

voselsoberano.com | Jueves 02 de Junio de 2011

Por Aníbal Delgado Fiallos

El Frente de Resistencia se fue conformando como organización política en la batalla contra el golpe de Estado; hondureños de las más diversas opciones ideológicas y políticas se fueron aglutinando en las movilizaciones y en asambleas de convocatoria abierta para manifestar su rechazo al orden de cosas instaurado, y para discutir sobre las características de la nueva instancia de lucha popular.

En los documentos que leí y en las discusiones a que asistí, encontré una constante totalmente correcta: el FNRP debería ser la alianza nacional demandada por nuestro pueblo para impulsar los procesos de transformación social.

Creo entonces que la tarea central del momento, es dar vida a esa alianza, con todo lo que ello significa en materia de definición doctrinaria, objetivos, estructuración de un discurso que oriente y no confunda, métodos de dirección que lo pongan a salvo del caudillismo, el sectarismo y el oportunismo que por definición deforman, resquebrajan la unidad y debilitan los impulsos esenciales.

Ir por otro camino sería fatal no sólo para la organización misma sino para el país, porque ello significaría prolongar sin perspectivas visibles la vigencia del atraso y la injusticia social.

Las tendencias que se observan no son para alegrarse; los discursos y declaraciones del domingo y después del domingo, que en su incoherencia reflejan intencionalidades que no encajan en la naturaleza revolucionaria del Frente, llaman a pensar que esta organización es concebida por círculos de indudable influencia interna, como un aparato para atender exclusivamente las líneas de su Coordinador General.

Si estas tendencias persisten y no se establecen las fronteras que son obvias, se estará perdiendo el gran objetivo, porque la estructuración de un Frente Amplio requiere temple unitario; sobre todo evidencias claras que en el llamado no hay aprovechamiento de la buena voluntad de nadie; si estas condiciones no existen, si campea el verticalismo antidemocrático, las fuerzas de la dispersión comenzarán a operar y a debilitar las fuerzas de la unidad que generalmente exhiben vacilación en los momentos de las grandes decisiones.

Lo he dicho en esta columna y en otros espacios de discusión: la participación del expresidente Zelaya y su grupo de amigos y familiares en esta lucha, por ser originaria, es inexcusable y se percibe una esperanza generalizada que sea noble; su experiencia, su indudable liderazgo, su proyección internacional, deben ser ofrendados, sin pretensiones de hegemonía, en la realización del objetivo de nueva sociedad.




700 días y un adiós

voselsoberano.com | Jueves 02 de Junio de 2011

Melissa Cardoza

Para las familias Leiva, Urbina, Palacios, Chirinos, Martins

Para la familia Necia



22 meses de resistencia concluyeron este 28 de mayo sin que Josué viera llegar a Mel Zelaya al país, cosa que a él le hubiera gustado, estar ahí encima de todos. Ese mismo día su cuerpo descansaba sereno, rodeado de margaritas, orquídeas, anturios, rosas y jazmines en la funeraria adonde lo despidieran todos sus amores juntos. Dentro del ataúd lo acompañaba una boina negra, unos anillos, una corbata improvisada por su papá, muy cerca de su rostro hermoso y pálido.

A él le importaba este retorno porque era un militante, un distinto militante a la generalidad. No era impostado, ni soberbio, no era acartonado ni violento contra quienes no formaban parte de su grupo ni compartían sus verdades. Debe ser por que la grandiosidad de su cuerpo no necesitaba notoriedad, pues ya la tenía, desde chiquito, nació con trece libras de peso.

Grandísimo y generoso: Josué.

Referente obligado en las marchas: “mirá, ves a Josué, ahí cerquita está la señora que vende baleadas” o “por allá atrás de Josué, ¿lo ves?” Josué se veía desde todas partes y cientos de personas lo conocían. Gran preocupación para Mina, que le decía, puchica a este es fácil que le den un balazo. No, contestaba, con su sonrisa desfachatada, no se preocupe, mejor sobeme la espalda, venga, lo cual le encantaba, y como bien dice su tía, sobarle la espalda a Josué era como lavar un carro. Así grandote la levantaba a ella en vilo y le daba vueltas hasta marearla, eso hacía con muchas de nosotras, sin importar el exceso de nuestras libras. Un día lo asaltaron, se rieron de él en casa porque dijeron que el ladrón fue un cipotío, pero él se defendía diciendo que precisamente cómo le iba a pegar a un cipote.

Tanto cuerpo y un breve corazón que se apagó de repente. El corazón se cansa de usarlo dice Galeano, y seguro que eso debe ser.

Qué duro despedirlo, con solo 29 años, con ese modo de andar, irremediablemente feliz como lo llamara uno de sus compas, qué dolor y que pérdida para este movimiento que necesita que gente así, tan escasa, nos muestren otros modos de andar en la política sin extirpar la humanidad propia y la ajena en el intento.

Antes de dejarlo en la tierra de Soroguara, su abuela lo despidió y dijo que era un tierno. Y lo era, un tierno es un bebé, y un hombre que irradia ternura. Era ambas cosas. Pero también irradiaba diálogo, tranquilidad y convicción. No echaba mucho rollo, trabajaba silencioso y fumador en sus espacios virtuales llevando palabras de resistencia hacia todas partes, y cuando hablaba decía lo que pensaba, sin aplastar a nadie con ello, pero sin callarse, fórmula poco usada en el medio.

Hombre austero para vivir, en su habitación estaban sus libros de cabecera: Todos los hombres son mortales, de Simone de Beauvoir, otro de Saramago, del Ché. Quedó su computadora llena de cosas suyas, su música, sus libros técnicos, sus enormes camisas, y dos pares de zapatos. Estaba lleno de todo, ¿que más necesitaba? Al contrario de tanta cara angustiada y amargada que una encuentra en la Resis y que una muchas veces porta, él sonreía frecuentemente con esa luz inagotable. Tenía convicción de las que alimentan, tenía su Necio grupo que lo sostenía, sus músicos Guancascos, enamoradas, el amor y abrigo de esa familia hecha de retazos de familias que van formando tejidos multicolores, y su manera personal de aportar a las luchas. No competía con nadie, no anhelaba un poder para sí, y confiaba en la gente alrededor. Había mucha gente cerca suyo. En el largo velorio desfiló mucho rostro joven y no tan joven, muchas caras que fueron a despedirlo. De todas las posiciones políticas o sin ellas. Hombres y mujeres lo lloramos por igual. Hay pocas cosas tan democráticas como el dolor.

Dejemos que se vaya apaciblemente, amorosamente, pidió Carlos, su papá y mi amigo querido, en el momento de enterrarlo. Y recordó que amanecía detrás del Pico Bonito en La Ceiba, cuando Susana ya iba casi pariéndolo en el carro hacia el hospital, el primer recuerdo de su hijo.

Como la luz de ese amanecer fugaz e inolvidable, eso es Josué y su mortalidad que recuerda la nuestra.

¡Ay Josué, si pudieras escucharme¡



Adonde vas, le preguntó Owen a su papá, la mañana del entierro.

A enterrar a un compañero

¿Quién?

Josué, uno de los Necios, uno grandote

¿El gigante? ….. ¿Papá, entonces los gigantes también se mueren?



Intibucá, 1 de junio del 2011



FER: Invitación a plantón frente a la OEA

Jueves 02 de Junio de 2011 
INVITACION
PLANTON FRENTE A LA OEA

FECHA         Viernes 3 de Junio del  2011
HORA:          10:00 a.m.

Dirección:    Colonia San Carlos, 3ra. calle, casa No.228, frente la embajada de Japón (atras del centro comercial Los Castaños, por donde esta el parqueo techado) 
Las Feministas en Resistencia, invitan por este medio a todas y todos a realizar un Plantón frente a las oficinas de la OEA en protesta por la readmisión de Honduras en la OEA sin haber considerado el avance en los derechos humanos y la impunidad de los autores del Golpe de Estado.

Acción esta se realizará de cara a la 41º sesión de asamblea general de la OEA que se realizará en San Salvador el próximo 5 de Junio.

Les esperamos
FEMINISTAS EN RESISTENCIA



Honduras es readmitida en la OEA por mayoría de votos
La representante de Ecuador ratificó que su país no avala el regreso de Honduras porque considera que “la plena restauración de la democracia, necesaria para su retorno, aún no se ha cumplido”.
El Libertador | Para Kaos en la Red | 1-6-2011

Por mayoría de votos, Honduras es readmitida en la Organización de Estados Americanos (OEA) luego de permanecer fuera del organismo tras el golpe que botó de la presidencia a Manuel Zelaya Rosales el 28 de junio de 2009.

Los 33 países que conforman la OEA acuden a la reunión extraordinaria convocada desde la semana anterior a fin de analizar los alcances del “acuerdo de Cartagena” para que Honduras pueda acudir a la próxima Asamblea General que se llevará a cabo en San Salvador, El Salvador este próximo fin de semana.

La reinserción del país se deriva de la mediación que realizaron los presidentes de Venezuela y Colombia, Hugo Chávez y Juan Manuel Santos, respectivamente en abril pasado donde se definió una “agenda mínima” que contempla: El retorno de los exiliados más Zelaya; la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente; el respeto a los Derechos Humanos y el reconocimiento del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) como una fuerza política.

El primer punto de la agenda se cumplió el fin de semana anterior, cuando el defenestrado gobernante regresó a Honduras tras permanecer exiliado en República Dominicana desde el 27 de enero de 2010, cuando dejó “formalmente” el cargo de presidente constitucional, por lo que queda pendiente la ejecución de los otros enunciados.

Con respecto a la readmisión del país, Ecuador se pronunció hace unos minutos que “no votará a favor” del regreso de Honduras a la OEA, porque aún no se han castigado a los autores materiales e intelectuales de la asonada militar.

Mientras tanto, el resto de Estados que forman parte de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se han pronunciado a favor de levantar la suspensión que el país centroamericano, y repúblicas como Brasil han solicitado beneplácito para enviar a un embajador a fin de restablecer las relaciones diplomáticas que fueron suspendidas después del 28 de junio de 2009.

A estar hora, Dominica; Costa Rica; Chile; El Salvador; Estados Unidos; Canadá; Guatemala; Guyana; Haití; Jamaica; Nicaragua; Panamá; Paraguay; Perú; Dominicana; San Cristóbal; Santa Lucía; San Vicente; Trinidad y Tobago; Uruguay; Venezuela; Argentina; Bahamas; Belice; Brasil; han avalado la iniciativa, por lo que desde ya Honduras vuelve a ser miembro pleno por lo que se abren las puertas para el financiamiento externo.
OEA aprobó reingreso de Honduras / Agencia Venezolana de Noticias

Con una votación de 32 a favor y uno en contra (Ecuador), los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobaron este miércoles el reingreso de Honduras a este organismo hemisférico.

En junio de 2009, Honduras fue suspendida de la OEA tras el golpe de Estado contra el presidente de ese país, José Manuel Zelaya.

El reingreso de Honduras a la OEA fue aprobado por El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Jamaica, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas, Trinidad y Tobago, Uruguay, Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, El Salvador, Brasil, Belice y Colombia, entre otros.

Venezuela aprobó, con reservas, el reingreso de Honduras a la OEA.

“Tenemos reservas sobre esta resolución. La aprobamos con reservas y explicaremos suficientemente nuestra posición”, expresó el canciller venezolano Nicolás Maduro.

Ecuador votó en contra de la resolución de reingreso de Honduras a la OEA.

La representante de Ecuador ante la OEA, María Isabel Salvador, ratificó que su país no avala el regreso de Honduras al ente multilateral porque considera que “la plena restauración de la democracia, necesaria para su retorno, aún no se ha cumplido”.

La diplomática señaló que la negativa de Ecuador se debe a que la justicia hondureña no ha castigado a los culpables del golpe de Estado de 2009 contra Zelaya, y las posteriores violaciones a los Derechos Humanos contra la resistencia hondureña.



 La reincorporación de Honduras a la OEA deja al pueblo indefenso ante el régimen Giorgio Trucchi ::
Sectores de la Resistencia hondureña consideran que fue un grave error
2/6/2011
La Asamblea extraordinaria de la OEA votó ayer (1/6) levantar la suspensión del derecho de participación de Honduras a esta instancia internacional, decisión que había tomado en julio de 2009 a raíz del golpe de Estado que derrocó al presidente Zelaya. La resolución fue aprobada con 32 votos a favor y uno en contra (Ecuador). Venezuela respaldó la medida “con reserva”.

Pese a que el actual coordinador nacional de la Resistencia hondureña, Manuel Zelaya, dijo sentirse satisfecho con el levantamiento de la sanción a su país, amplios sectores de esta misma organización condenaron esa medida. “La reincorporación es una humillación a la dignidad no sólo del pueblo hondureño, sino de todos los pueblos del mundo que luchan contra la impunidad”, dijo Bertha Cáceres, coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH).

Según ella, esta decisión ratifica “la decadencia de esta instancia internacional” y va a permitir que en Honduras “se sigan violentando los derechos humanos y que en el mundo continúen los intentos de golpe de Estado”.

Para la directiva del COPINH, al pueblo hondureño queda ahora el desafío de enfrentarse a los impactos que esta decisión va a tener en términos de impunidad e indefensión, luchando para construir su propio destino.

“No vamos a olvidar lo que ha pasado y vamos a dejar constancia histórica de nuestro rechazo a esta decisión. No vamos a perdonar, ni a reconciliarnos, ni mucho menos a reconocer a este régimen, mientras tanto no haya justicia y democracia real para el pueblo hondureño, no se resuelvan sus demandas más sentidas y no se castiguen a los represores”, afirmó Cáceres.

También la coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), Bertha Oliva, consideró que no puede dejar de expresar su preocupación con el tema de los derechos humanos.

“El estado de derecho está roto y los escombros que han quedado siguen en poder de los que promovieron, avalaron y defendieron el golpe. ¿Cómo podemos dar respuesta al pueblo que demanda justicia y libertad?”, se preguntó Oliva.

Para la defensora de derechos humanos, la reincorporación de Honduras a la OEA sin ninguna evaluación previa de la situación de los derechos humanos ha sido un segundo golpe de Estado. “Se le está dando carta blanca al régimen para que siga violentando los derechos humanos, porque no hemos visto ninguna voluntad para investigar los asesinatos y las violaciones cometidas contra los miembros de la Resistencia”, aseveró

Oliva aseguró que no queda otro camino que “persistir en la denuncia hasta desenmascarar y, en un futuro, derrotar a los culpables, porque no podemos acostumbrarnos a vivir entre los muertos. Los derechos humanos no pueden ser un tema de negociación política”. En este sentido, la reincorporación a la OEA agudizará más la represión y “con menos posibilidad de incidir a nivel internacional”, concluyó.

También para el miembro del FNRP, Mario Membreño, volver a la OEA significa “un lavado del golpe” y pasar a una etapa en la que “se nos quiere llevar a reconocer un régimen que va a profundizar el modelo neoliberal, que cercena las conquistas laborales y el derecho del campesinado a la tierra, y que mantiene a los principales golpistas y a los violadores de derechos humanos en el poder”.

Proceso acelerado

La aceleración que se dio al proceso de mediación que llevó a la firma de los Acuerdos de Cartagena - impulsados por los presidentes de Venezuela y Colombia -, al regreso del ex presidente Zelaya y a la normalización de las relaciones internacionales con Honduras, parece estar reproduciéndose también a nivel interno, de manera particular con respecto al futuro del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), y a la posibilidad de convertirse en partido político y participar en las elecciones de 2013.

Según Membreño, loa Acuerdos de Cartagena necesariamente tienen fuertes implicaciones para el FNRP, sobre todo en relación con las decisiones que tomó la gran Asamblea que se desarrolló en febrero. “La mayoría de los delegados decidió no participar en las elecciones de 2013 e iniciar un proceso de auto convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente”.

También consideró que el proceso de consolidación de la Resistencia llevó a la conformación de instancias y obligadas consultas para poder modificar estas decisiones. “Zelaya ya planteó posicionamientos personales que entran en contradicción con estas resoluciones. Dijo estar dispuesto a discutir sus propuestas con las instancias del FNRP, y es importante hacerlo lo más pronto posible”, dijo.

“Necesitamos entrar a un proceso de discusión profunda sobre los Acuerdos de Cartagena y el futuro del FNRP, involucrando a todas las fuerzas que hemos estado haciendo resistencia. Y esta discusión debe llevarse a cabo en las instancias que ya existen y que la Resistencia ha ido estructurando en estos dos años”, concluyó Membreño.